top of page

Impulsemos la Electromovilidad Urbana

  • Foto del escritor: Editorial puntanegra
    Editorial puntanegra
  • 12 nov
  • 3 Min. de lectura

Ciudades de todo el mundo impulsan planes para impulsar la electromovilidad en busca de la sostenibilidad


ree

Por Amauri González Gil


Sin duda alguna, la electromovilidad urbana ha pasado de ser una tendencia emergente a una necesidad imperativa en la agenda pública global, colocándose como una alternativa y una solución fundamental para mitigar el impacto ambiental y mejorar la calidad de vida en las grandes y modernas ciudades, así como en pequeñas comunidades. Este enfoque integral no solo abarca el uso de vehículos eléctricos personales, sino que también impulsa la electrificación del transporte público, como autobuses, taxis, vehículos de carga, bicicletas, patinetes y pequeños vehículos eléctricos enfocados en el sistema de reparto a domicilio.


Aspirar a este cambio y consolidar proyectos de quienes de alguna manera ya iniciaron esta ruta, traerá beneficios tangibles para el entorno urbano. Uno de los principales atractivos de la electromovilidad radica en sus beneficios medioambientales y de salud pública.


Al impulsar la electromovilidad se impulsan estilos de vida publica más saludables, se reduce la contaminación, se crea un nuevo lenguaje y una nueva cultura en movilidad y los efectos beneficiarán a toda la sociedad y sus futuras generaciones. A continuación, podemos enumerar algunos de los beneficios que puede generar la iniciativa de la electromovilidad urbana:


  • Cero Emisiones Directas: Como ya sabemos los vehículos eléctricos eliminan por completo las emisiones de contaminantes del escape, contribuyendo directamente a una mejora significativa en la calidad del aire de las ciudades y de sus habitantes.

  • Gran reducción de la Contaminación Acústica: Este tipo de vehículos se caracterizan por ser más silenciosos que los motores de combustión interna, la movilidad eléctrica ayuda a disminuir el ruido ambiental, creando entornos urbanos más tranquilos y menos estresantes.

  • Eficiencia Energética: La electromovilidad promueve un uso más eficiente de la energía, especialmente cuando se alimenta de fuentes renovables, lo que contribuye a la sostenibilidad a mediano y largo plazo.

  • Ahorro en costos de mantenimiento en vehículos: Los vehículos eléctricos tienen menos costo de mantenimiento y recarga, lo que beneficia al medio ambiente y a la economía del propietario.

  • Fomento de empleo: La electromovilidad genera empleos directos e indirectos en la industria de la movilidad eléctrica, iniciativa que fortalece la economía de las entidades.

 

Como podemos observar los beneficios son claves y los resultados bonificarían de manera integral a toda una sociedad. Cada región tiene sus propios retos generados a raíz de los contextos demográficos y socioeconómicos, en los últimos años, el interés por los vehículos eléctricos ha experimentado un crecimiento notable, impulsado por la conciencia sobre la sostenibilidad y los menores costos operativos a largo plazo, y son las nuevas generaciones quienes han adoptado, en las medidas de sus posibilidades, las iniciativas de electromovilidad. En nuestro país, las ventas de vehículos eléctricos van en aumento, y su presencia cada vez es más visible, especialmente en híbridos como bicicletas eléctricas, patines eléctricos también conocidos como “scooters o mono patines eléctricos”, así como distintos híbridos enchufables como motocicletas y automóviles de mayor tamaño.


A pesar del interés social por esta alternativa de vehículos persisten desafíos importantes para consolidar su presencia masiva. En primer lugar, la falta de infraestructura de carga, fenómeno que se ha observado en grandes países y en distintas regiones que de manera progresiva le están apostando a la electromovilidad, es un reto crucial para los usuarios de vehículos eléctricos, impulso a nuevas políticas públicas y planificación, así como la adaptación urbana de vialidades y espacios eficientes para el uso óptimo de este tipo de vehículos.


El futuro debe ser eléctrico y prácticamente está a la vuelta de la esquina, cada vez son más las comunidades que apuestan a la electromovilidad como base de desarrollo. Los expertos y lideres en esta industria muestran coincidencia en que el futuro de la movilidad urbana estará plenamente ligado a la electrificación, y es muy claro que para desarrollar un ecosistema exitoso para la electromovilidad debe participar activamente el sector público, los gobiernos, la iniciativa privada y la academia a través de planes educativos que motiven e impulsen a las actuales y nuevas generaciones a incorporarse y participar en esta transición llamada electromovilidad.  


Es momento de actuar, ciudades de todo el mundo están trabajando en planes y estrategias para facilitar esta transición, buscando no solo ser más limpias, sino también más eficientes y resilientes a través de la electromovilidad.

Comentarios


bottom of page